Dos hombres fueron brutalmente acribillados en un sector del barrio Buenos Aires de Tegucigalpa, la capital de Honduras, zona central del país.
Las víctimas, identificadas como Brayan Osorto García y Miguel García, se encontraban socializando y consumiendo bebidas cerca de las gradas de la iglesia Católica San José, cuando fueron sorprendidos por los criminales.
Sus cuerpos quedaron tirados en las gradas, escena que fue posteriormente atendida por Medicina Forense para proceder con el levantamiento de ley.
Además de las dos víctimas mortales, una tercera persona también fue alcanzada por las balas y quedó gravemente herida. Esta persona fue trasladada de urgencia a un centro asistencial, aunque hasta el momento se desconoce su estado de salud.
